Canarias
Vegetación



Canarias: Vegetación:
Jardín botánico Parque García Sanabria

Laurisilva:
Es característica de las zonas montañosas de la vertiente norte comprendidas entre los 400 y los 1.500 metros. La considerable humedad que capta permite que el suelo se cubra de helechos. Las precipitaciones en Canarias son escasas (324 mm). Las islas más altas son las que captan mayor humedad de los alisios (Tenerife, La Palma y Gran Canaria). La lluvia horizontal supone un aporte llega a triplicar la precipitación anual. Cuando los alisios cargados de humedad ascienden por por las laderas de las islas más altas, el aire húmedo se condensa y se forma una densa masa nubosa (mar de nubes). La insolación se reduce y se suavizan las temperaturas. Durante el Periodo Terciario (20 millones de años) estaba presente en la región mediterránea pero desapareció durante el Periodo Cuaternario. Por las evoluciones del clima quedó reducida a la zona de la Macaronesia. Las mejores representaciones son las del Bosque de Garajonay, El Canal y Los Tilos, en La Palma y los Parques Naturales de Anaga y Teno. En Gran Canaria desaparecieron con gran rapidez. De lo que fue la Selva de Doramas queda un 1% como Los Tilos de Moya, el Barranco Oscuro o el Barranco de Azuaje.

El pájaro canario vive en zonas de diverso tipo pero tiene preferencia por las zonas medias desforestadas. En la laurisilva conviven gran variedad de aves como el petirrojo, el pinzón vulgar, la chocha perdiz o pedradores como el búho chico o el gavilán. Las más emblemáticas de la laurisilva, endémicas, y amenazadas de extinción son la paloma rabiche y la paloma turqué.

Según Humboldt el desaparecido Drago de La Orotava (1867) superaba los 6.000 años de antigüedad. El ejemplar de mayor porte que se conserva es el de Icod de los Vinos. La extracción de áridos en las desembocaduras de los barrancos ha desprovisto de cobertura vegetal amplias zonas de terreno.

Las Cañadas del Teide:
Uno de los cuatro Parques Nacionales que se encuentran en Canarias. El Valle de Ucanca, dentro Las Cañadas del Teide está a 1.980 metros de altitud y está sometido a unas peculiares condiciones meteorológicas. En unas horas experimenta un acusado contraste de temperaturas. Puede pasar de un calor intenso a un frío extremo. Desde mayo a julio no hay práctica presencia de lluvias, pero durante el resto del año sí recibe abundantes precipitaciones. Las flores de aspecto delicado de las retamas contrastan con las duras condiciones que debe soportar la planta. Las plantas más llamativas son los taginastes rojos. A partir de los 2.000 metros de altura las temperaturas pueden alcanzar los 15ºC bajo cero y las nevadas de invierno se hacen frecuenets. En Las Cañadas durante la primavera los tajinastes combinan su rojo intenso con el amarillo de las hierbas pajoneras. En la época de floración coinciden los blancos y rosados de la retama del Teide, los blancos y morados del alhelí del Teide y el amarillo de la flor del malpaís. Los mejores miradores para contemplar tajinastes son los del Tabonal Negro, los Azulejos y del Llano de Ucanca.

Malpaís de Güímar
La Reserva Natural Especial del Malpaís de Güímar comprende un cono volcánico y el campo lávico asociado que discurre en forma de abanico hasta el mar. Los materiales que lo integran son de naturaleza basáltica y la vegetación está compuesta por grandes ejemplares de cardones, tabaibas, romeros marinos, verodes y cardoncillos. En cuanto a la fauna, destacan las aves nidificantes -se han localizado 15 especies- y varias especies endémicas ligadas a los cardones y las tabaibas.

La franja continental de la costa sahariana es árida y parecida a zonas costeras de Lanzarote y Fuerteventura. En ella están presentes de forma visible las tabaibas y cardones junto con otras pequeñas plantas.

En los bordes de las carreteras entre Barlovento y Los Sauces se decidió plantar tabaibas originadas en viveros, decisión acogida con críticas. Según W.Rodríguez Brito las tabaibas ocupan posiblemente la mayor superficie de los últimos 500 años. Las zonas bajas de las islas, antaño pastos o tierras de pan sembrar, están ocupadas por densos tabaibales. Entre las especies adaptadas a las zonas áridas y a suelos pobres están los almendros, higueras, tuneras. Se han adaptado también otros frutales con más requerimientos de humedad, como nísperos o naranjos.

La planta introducida de manera accidental que ha resultado ser más perjudicial es el rabo de gato (Pennisetum setaceum). Originaria del este de África, fue introducida con un fin ornamental. Se caracteriza por su alta capacidad reproductora, tanto sexual como asexual, que la convierte en una especie altamente invasora que desplaza a la vegetación autóctona. Cada planta puede llegar a producir hasta 10.000 semillas de gran facilidad de dispersión. En apenas 3 meses alcanza la madurez reproductiva y comienza a producir semillas.

Garajonay:
El monteverde canario cubre más del 85 % de su superficie y está compuesto por cerca de 20 especies arbóreas. Las especies se distribuyen y mezclan de acuerdo con sus afinidades ecológicas, para formar varios tipos de bosques diferentes. Las dominantes son el haya, el acebiño, el loro, el viñátigo, el palo blanco y el brezo arbóreo, (aquí alcanza posiblemente las mayores tallas de la especie en todo el mundo, llegando a acercarse a los 20 m de altura). Otras especies como el til, el tejo canario y el barbusano son abundantes de forma local. Destaca también la abundancia de musgos y líquenes recubriendo los troncos de los árboles, así como la cobertura de helechos, indicadores de la elevada humedad ambiental

Los nuevos habitantes de edificaciones cercanas a tierras dejadas de cultivar no poseen las costumbres y medios usados antaño para evitar el avance de los incendios. El campesino de medianías responsable tenía asumido que no debía dejar acumular retamas, zarzas, hinojos o pajonales cerca de las edificaciones. Las medidas preventivas son ahora ejercidas por bomberos, el helicóptero y las brigadas forestales (Brifor).


Preservación del medio natural:
Es necesario concienciar a nuestra gente de los valores del paisaje insular y de la vegetación autóctona, de la necesidad de mantener y restablecer el equilibrio ecológico de nuestros parajes naturales, la exigencia de respetar la fauna de aves y reptiles del Archipiélago y, en fin, hacer reflexionar a todos de que cualquier agresión del medio es simultáneamente una agresión contra nuestra misma colectividad. No podemos seguir plantando casas y edificios en donde les venga en gana a cualquiera, no podemos seguir haciendo un basurero de cualquier rincón paisajístico, no podemos seguir desconociendo que el medio natural es la auténtica base de nuestra vida y de nuestra supervivencia. (Alfredo Herrera Piqué, 1980)

Reserva de la Biosfera de La Palma:
En 1983 la Unesco declaró la zona de Los Tilos como Reserva de la Biosfera. En 1987 es declarado como tal el Parque Natural de Las Nieves, que ocupa un área de 5.094 hectáreas de los municipios de Puntallana, San Andrés y Sauces y Santa Cruz de la Palma. El área incluye a Los Tilos y Los Sables, considerado Lugar de Importancia Comunitaria. El Cubo de La Galga, en el municipio de Puntallana, es una de las mejores muestras de la laurisilva de Canarias. Alberga gran cantidad de helechos, fayas, viñátigos, laureles y acebiños. En 1997 pasa a formar parte del Parque Natural de Las Nieves y de la Reserva de la Biosfera de La Palma. En 2002, en la sede de París de la Unesco se decide ampliar la reserva a toda la isla, convirtiéndose así en la tercera isla, junto con El Hierro y Lanzarote en recibir la denominación. Dentro de la reserva quedan incluidos varios parques naturales así como el Parque Nacional de la Caldera de Taburiente.

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