Comic:
Laerte Coutinho: Piratas del Tietê y otros bárbaros:
El libro recopilatorio fue editado por Circo Editorial (Brasil) en 1994.
Apareció publicada en tiras en la revista Circus en los 80. Se encuadra en el género de humor con cierto contenido de crítica política. Contiene historias ingeniosas y concisas que supieron adaptarse a la llegada de la democracia (1985). Los piratas saquean y torturan por mera diversión a cualquiera que se encuentre con ellos.
Moebius:
Arzach fue publicado por Metal Hurlant en 1975.
Consta de una colección de relatos cortos sin continuidad entre ellos narrados con una extraordinaria calidad gráfica.
Un individuo solitario vuela a lomos de una criatura parecida a un pterodáctilo y protagoniza extrañas aventuras en un entorno extraterrestre.
El Incal fue publicada por Metal Hurlant en 1980.
El Incal es un cristal sensitivo que cae en manos de un investigador privado.
Una historia de desconcertante complejidad.
Quino:
Toda Mafalda fue publicada en 1964 por Primera Plana (Argentina).
Una niña de seis años que vive en Buenos Aires durante la década de 1960.
Le encantan los Beatles y quiere un televisor, pero también le preocupa la pobreza, la guerra nuclear y el imperialismo cultural.
Entre sus amigos Felipe es muy sensible, Manolito posee mentalidad empresarial y Susanita anhela convertirse en esposa y madre.
Odia la sopa y ve alterada su vida familiar con la llegada de su nuevo hermanito Guille.
El cambio en la rutina diaria que traen las vacaciones supone una auténtica liberación.
Maitena:
Nacida en Buenos Aires.
En 1994 empieza a publicar sus Mujeres alteradas.
Empieza a hacer la página cuando tenía 26 años.
Se ganaba la vida dibujando viñetas para textos escolares y revistas de todo tipo.
La autora creía tener muy poco en común con la revista femenina que le propuso una página de humor semanal.
En 1999 Mujeres alteradas se publica en el El País Semanal con el texto adaptado a España.
Obtuvo una gran acogida su serie de mujeres combativas, desbordadas, resignadas y cansadas.
Entre 1998 y 2003 publica en el diario argentino La Nación su serie Superadas.
Curvas peligrosas recopila en forma de libro sus trabajos para La Nación.
El Eternauta (1957):
Los dibujos son de Francisco Solano López. Juan Salvo, el «Eternauta», se materializa en casa del guoinista Oesterheld sin previo aviso. Una extraña nevada venenosa deja la ciudad en el caos provocado por los escasos supervivientes. El ingenioso profesor de Física Favalli logra crear un traje aislante parecido a una escafandra para poder moverse a la intemperie. Deben luchar contra unos escarabajos gigantes a los que llaman cascarudos, simples fuerzas de choque teledirigidas por seres más inteligentes. Un artefacto productor de alucinaciones hace a las tropas de resistencia pelearse entre sí. Al tratar de operar una nave extraterrestre para escapar del lugar, Juan acciona por error un dispositivo que lo envía a una dimensión paralela llamada Continum 4. Inicia la búsqueda de su familia a través de infinitos Coninum, que le llevan a encontrarse con el guionista.
Pérez Andújar sobre el cómic:
● En Aspirino y Colodión, los protagonistas son el inventor Aspirino (el bajito de la barba) y su ayudante Colodión (el alto, con gorra de marinero), aunque a menudo Colodión inventa más que su jefe; pero también aparecen Topolino, desde luego, y el policía Adolfo, que es un poli de la Keystone, y, claro, no faltan unos villanos propios de seriales folletinescos. Aspirino y Colodión empezó a publicarse en 1966, en Capitán Trueno Extra; su título original era todo un homenaje al género: Los extraños inventos del profesor Pastillofsky, pero a Bruguera no le gustaba este título y lo cambió.
[...]
● Capitán Barlovento: Castillo, con su Capitán Barlovento, es el dibujante que mejor ha plasmado en los tebeos de Bruguera la tristeza y la soledad del mar. Al Capitán Barlovento le sienta tan bien el bitono como la cuatricromía, porque en Barlovento, más que la caza de la ballena por un capitán miembro de la liga protectora de animales y plantas, y más que el oleaje y la resaca del océano, y más que el hormigón de los muelles, se está dibujando todo lo que eso sugiere. Lo que pone en sus páginas Castillo no es un personaje o un carácter, sino un estado de ánimo. El Capitán Barlovento es un cazador de ballenas de esos mares como lijados, o dejados en un taller de soldadura, y de esos días de llovizna que se ven al navegar las aguas del Norte. Hay en toda esta serie una tristeza apagada, que es la tristeza del acero con que están construidas las estructuras de los barcos, y por tanto tiene además algo de tristeza de astillero; pero es también la suya la tristeza movediza de las mareas negras y de las olas sucias de petróleo. En el Capitán Barlovento los barcos están sucios y destartalados, que es como son los barcos cuando andan por alta mar, y a su manera la serie va a ser un presentimiento del chapapote que trajo la gran crisis del petróleo del 73. A pesar de publicarse en un tebeo, no se trata de una historia para reírse con ella o para disfrutar con sus aventuras de balleneros, sino para mirarla desde lejos, para invertir el catalejo y colocar lo más al fondo posible a las figuras, y dejar solo al mar; porque es esto, el mar, el principal protagonista de las historietas de Castillo, y la tripulación del Boquerón, como se sabe prescindible, a la primera de cambio se echa a dormir a bordo, en cubierta, en sus camarotes… El capi, su segundo Marsopínez, el cocinero chino, el vigía melenudo, el gato chistoso que se llama Lucifer, la rata Rufina…, parecen un grupo de rock, y con ellos vibra en estas viñetas el pesimismo de hierro, o de acero, que también puede encontrarse en discos como el Physical Graffiti o el Animals, por ponernos clásicos, o en la canción I Want You de los Beatles, por mantener nuestras lealtades. Aunque para lealtad, la de Castillo hacia su mar, que va y coge una historieta y la titula «Moby Dick» y empieza la plancha dibujando en la primera viñeta únicamente eso, el océano.
● Frases de Goscinny: ¿Cuándo se come aquí? Pronunciado entre otras maneras cococuacuakiki y couacomékiki, es lo que pregunta todo el rato Averell Dalton en Los Dalton van a México. 2. Están locos estos romanos. La dice Obélix. En las traducciones al italiano de los álbumes de Astérix, se atribuyó a la inscripción SPQR (Senatus Populusque Romanus) el significado de Sono Pazzi Questi Romani. 3. I’m a poor lonesome cowboy. 4. No, tú no cantarás. Es lo que, acompañado de golpes, le dice siempre el herrero Esautomátix al bardo Asurancetúrix cuando se dispone a cantar. 5. Quiero ser califa en lugar del califa. Frase que repite del visir Iznogoud.
[...] Tengo la casa llena de tebeos. Metidos por todos los cajones igual que quien guarda una llama de amor viva.
[...] La casa se va convirtiendo en un quiosco porque ahí es donde yo quise vivir de muy pequeño.
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