EE.UU.: Corte Suprema: En el año 2000 la Corte decidió detener un recuento de votos en Florida, nombrando de hecho a George W. Bush como ganador frente a Al Gore. En febrero de 2016 muere Antonin Scalia, conservador propuesto por Reagan. El 26 de febrero de 2016 se publica que la Administración Obama estaba investigando a Ketanji Brown Jackson como posible candidata a la Corte Suprema. En 2010 la Corte Suprema, en el caso de Citizens United, toma la decisión de flexibilizar las leyes sobre donaciones de campaña. Sigue el argumento de que el gasto en campaña es una forma de expresión protegida por la Primera Enmienda, y las corporaciones y los grupos de defensa tienen derecho a la libertad de expresión, al igual que las personas. Una abrumadora mayoría de los ciudadanos de todos los partidos se oponía a una decisión que aumentara el poder real de las grandes corporaciones. Durante el discurso sobre el estado de la Nación Obama criticó la decisión del tribunal: Ha revertido un siglo de ley que creo que abrirá las compuertas para que intereses especiales, incluidas las corporaciones extranjeras, gasten sin límites en nuestras elecciones. En 2013 la Corte Suprema anula en la práctica una sección de la Ley de Derecho al Voto. Dictamina que el enfoque del gobierno frente a la reconfiguración de distritos era inválido porque no podía seleccionar estados para su revisión basándose en las prácticas raciales que los estados llevaban a cabo más de 50 años antes. Durante el último año del mandato de Obama (2016) el líder republicano en el Senado Mitch McConnell bloquea el proceso de elección para nombrar a Merrick Garland sustituto de Scalia. Se dejaron al margen la cortesía, normas y justicia para capturar la Corte Suprema y ponerla al servicio de una agenda propia. Durante la campaña por la presidencia de 2016 la juez Ginsburg, continuando su crítica a la negativa de de Trump de publicar sus declaraciones de impurestos, hace un comentario tachando a Trump de farsante. Trump pide su dimisión y Gisnsburg hace otro comentario reconociendo el exceso cometido. El 3 de abril de 2017 Neil Gorsuch recibe la aprobación del comité del Senado para formar parte del Tribunal Supremo. Ocupa un puesto que, de haberse seguido los procedimientos habituales, habría ocupado Garland. En julio de 2018 el conservador Anthony Kennedy, considerado un centrista en la práctica, pasa asituación de retiro. Las sesiones para la aprobación de Brett Kavanough alcanzan un nivel nunca visto en cuanto a polémica. Como había sido el caso de Clarence Thomas, se enfrentó al creíble y tenaz testimonio de una víctima de abuso sexual. En 2019 la Corte Suprema dictaminó en dos casos de redistribución de distritos a favor del poder del Estado frente a las normas federales. La manipulación partidista de distritos para socavar al partido contrario es vista como una cuestión eminentemente política y no corresponde a los tribunales regularla. Alito se muestra muy crítico con las restricciones ordenadas para el control de la pandemia durante 2020. Críticó un fallo de la Corte Suprema en julio que rechazó el desafío de una iglesia de Nevada a las restricciones estatales sobre la asistencia a servicios religiosos. El fallo se decidió por 5 votos a 4. El 18 de septiembre de 2020 muere Ruth Bader Ginsburg. El 27 de octubre de 2020, a pocos días de las elecciones, se nombra a Amy Coney Barrett juez de la Corte Suprema. Es miembro destacado de la Federal Society, de filosofía conservadora, libertaria y opuesta a la intervención del Estado. En noviembre de 2020, durante la convención anual de la Federal Society, Samuel Alito dice a un grupo legal conservador que los liberales representan una amenaza creciente a la libertad religiosa. Trump nombra a tres jueces durante su mandato, dejando una mayoría conservadora de 6 a 3. El abogado de la Casa Blanca, Donald McGahn, juega un papel fundamental en la elaboración de la lista de candidatos presentados. Durante el proceso para la aprobación se les pregunta en el Senado a todos los candidatos por la intención o conveniencia de revisar Roe v. Wade y todos expresan algo parecido a una negativa. Una clara mayoría de norteamericanos se opone a añadir más dificultades para el acceso al aborto y quieren controles más efectivos sobre la posesión de armas. El Legislativo mantiene unas leyes en esos dos aspectos que no reflejan los deseos de una clara mayoría de norteamericanos. La gran mayoría de los padres norteamericanos demandan cambios para que sus hijos no corran el riesgo de ser abatidos en las escuelas con fusiles de asalto. El enfoque en el pasado de los originalistas hace que el derecho de los padres sea mucho menos tenido en cuenta que el derecho a portar armas. Durante la campaña electoral para 2020 Biden se compromete a nominar una afroamericana para el tribunal en caso de que se produjera una vacante. Después de las elecciones de 2020 la esposa de Clarence Thomas, Ginni, se dedicó a presionar a altos funcionarios para que rechazaran los resultados electorales. La aceptación de lujosos regalos por parte del conservador Thomas lo convirtieron en un miembro rodeado de polémica. El juez conservador Samuel Alito pronuncia en Europa una conferencia rechazando varios tipos de críticas que vienen recibiendo los miembros del Tribunal. En junio de 2022 se limita el alcance de Roe v Wade hasta el punto en que se habla de anulación. Como justificación se cita el propósito de acercar la decisión al electorado, en el sentido de que sean los Estados los que tomen las decisiones fundamentales. El fallo desata condenas y protestas masivas y fue seguido de una ola de aprobaciones de leyes restrictivas en muchos Estados. Es innegable que la medida tiene como resultado imponer a toda la ciudadanía limitaciones basadas en valores construidos sobre creencias cristianas. Biden responde a su paso a la pregunta de un periodista diciendo que este tribunal no es normal. La Corte Suprema continúa dedicada a aflojar un siglo de controles sobre las donaciones políticas y gastos de campaña. El 30 de junio de 2022 la afroamericana Ketanji Brown Jackson, nominada por Biden, ocupa el puesto por el retiro voluntario de Stephen Breyer. La Corte Suprema permite que las midterm elections 2022 de Alabama se realicen (noviembre) sin modificación previa de los distritos electorales vigentes. En septiembre de 2022 una encuesta Gallup señala que el 58% de los norteamericanos desaprobaba el trabajo de la Corte Suprema. En 2023 la Corte Suprema se ocupó del caso de una activista cristiana que sostiene que no se le puede exigir que diseñe sitios web de bodas para parejas del mismo sexo. Colocó en la parte central de su postura que a su actividad como artista no se le deben imponer límites exteriores. En 2023 la Corte Suprema se ocupó del caso de las admisiones universitarias que utilizan el color de la piel como factor. En 2023 el Pew Research Center publicó una encuesta según la cual sólo el 44% de los estadounidenses percibieron favorablemente al tribunal. Una crisis de aceptación sin precedentes. Los estudios sobre jurisprudencia señalan que los jueces de la Corte Suprema tienden a seguir en sus dictámenes la línea política del presidente que los nominó entre un 70% y un 80% de las ocasiones. En 2023 el decano de Derecho de Berkeley dijo: En un momento en que nuestro país está tan polarizado políticamente, la Corte Suprema es un factor de riesgo para la democracia estadounidense. En octubre de 2024 el jurista García Amado critica en un foro mexicano que las decisiones del Tribunal en España siempre se adivinan cómo resultarán con los votos siempre divididos entre 7 y 5 alineados con las tendencias políticas.
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